Trampa dulce
Después de casarse, Claudia y Rubén fueron distanciándose. Siguiendo el consejo de su prima, Claudia buscó ayuda de un psicólogo, Tomás, sin saber que terminaría envuelta en una relación ambigua. Al final, descubrió que todo había sido una trampa planeada por su esposo para acusarla de infidelidad, divorciarse y quedarse con su fortuna.